Modalidad híbrida para trabajar
Las empresas miran al futuro post-Covid. Para muchas, la visión es un modelo que combina el trabajo a distancia y el tiempo de oficina.
El Covid-19 volteo muchas vidas, los empleados de todo el mundo se han acomodado a los ritmos del trabajo remoto obligatoriamente.
Se han realizado diversas encuestas en varios países y estos son algunos de los resultados: el 55% de los trabajadores estadounidenses quieren una mezcla de trabajo en casa y en la oficina.
En el Reino Unido, los empresarios esperan que se duplique la proporción de trabajadores habituales en casa, pasando del 18% antes de la pandemia al 37% después.
En China, la experta en empleo Alicia Tung ha pronosticado que dentro de 10 años habrá una proporción de 60/40 de trabajo en casa.
Por el momento, las empresas se las arreglan de diversas maneras. Algunas han dado permiso a sus empleados para seguir trabajando a distancia.
Otras han vuelto a llamar al personal al lugar de trabajo en diferentes horarios y en grupos escalonados. Y otras están dejando que cada trabajador decida los días que quiere teletrabajar y los días que irán a la oficina.
Cómo es el trabajo híbrido
Pareciera que el término "híbrido" es clave para entender el futuro del trabajo más flexible. El trabajo híbrido tiende a incluir más libertad sobre cuándo y dónde trabajar.
En general, concede más autonomía a los empleados para que adapten el trabajo al resto de sus vidas, en lugar de estructurar otras partes de la jornada semanal en función de las horas registradas en la oficina.
Cada empleado tendrá la posibilidad de obtener la estructura y socializar dentro de la oficina por un lado y de tener independencia y flexibilidad del teletrabajo.
Un procedimiento habitual de las empresas con un modelo híbrido de trabajo se ha acelerado y se ha incrementado desde que comenzó la pandemia.
Este tipo de empresas designa ciertos días para las reuniones y la colaboración en la oficina, los días remotos para el trabajo de concentración individual.
La presencia física puede ser necesaria para las orientaciones, la creación de equipos y el inicio de proyectos, pero no necesariamente para el resto del trabajo. Intentar utilizar los días de trabajo en casa para las tareas que requieren concentración.
El lado oscuro del trabajo híbrido
Por supuesto, los modelos de trabajo híbridos no se adaptan a todo el mundo. En general, existe una enorme desigualdad entre quién puede trabajar desde casa y quién no.
La pandemia ha llamado la atención sobre las disparidades entre quienes pueden trabajar a distancia, como la calidad irregular del acceso a Internet; las exigencias de la crianza y el cuidado de los hijos; y el lujo de las casas amplias y el espacio exterior que hacen cómodo el trabajo desde casa.
A los que están hacinados en pisos muy pequeños no les gusta tener que trabajar desde casa la mayor parte de la semana.
También está la cuestión de la personalidad. Las personas que aprecian una rutina fija, por ejemplo, pueden encontrar difícil ir de un lado a otro del trabajo.
Se han escuchado frases como: "Pensé que estaría encantado de volver, pero tengo que decir que es difícil"; "Creo que la clave está en ser coherente y en adaptarse a cualquier cosa trabajo en la oficina o a distancia”.
Pero cuando haces ambas cosas, no tienes la oportunidad de adaptarte por completo a ninguna. Entras y sales, nunca puedes crear una rutina consistente.
Los equipos parcialmente distribuidos también pueden informar sobre ciertos problemas de comunicación.
Este tipo de conflictos son un poco más probables con la comunicación digital, en parte porque las inhibiciones sociales son más poderosas cuando se trabaja cara a cara.
Cómo hacer que la modalidad de trabajo híbrida sea útil
La preocupación por la exclusión involuntaria de los trabajadores a distancia está detrás de una de las principales sugerencias: aspirar a la equiparación.
Lo ideal sería que todos los trabajadores estuvieran en la oficina los mismos días, aunque esto puede ser poco práctico en oficinas socialmente distanciadas.
Los líderes deberían estar en el mismo lugar que los empleados, en la medida de lo posible, con más o menos el mismo tiempo presencial.
La comunicación transparente también es fundamental. Se aconseja a las empresas híbridas que realicen reuniones de grupo de forma totalmente distribuida, cada uno en sus dispositivos.
De ese modo, todos pueden ser vistos y escuchados, por lo que no se tiene la mesa de conferencias distante con las caras borrosas.
Un lugar de trabajo híbrido eficiente no debe exigir que todos trabajen las mismas horas, al mismo ritmo.
También ayuda a fomentar la autonomía de los empleados, lo que nos lleva a la última sugerencia para optimizar el trabajo híbrido: la modularización. Se trata de dividir el trabajo en tareas que los empleados puedan realizar de forma independiente y tomar decisiones rápidamente, sin necesidad de que los compañeros estén conectados simultáneamente.
En otras palabras, un lugar de trabajo híbrido eficiente no debe exigir que todos trabajen las mismas horas y al mismo ritmo, aunque a veces sea necesario.